VIOLET es una nueva propuesta arriesgada de la Roundabout Theatre Company en Broadway. Las sofisticadas escenografías, las impactantes coreografías, los grandes números musicales, desaparecen del escenario del American Airlines Theatre de Nueva York para centrarse en la belleza de la historia y de las melodías y en el buen hacer de los protagonistas.

VIOLET, basado en el relato corto ‘The Ugliest Pilgrim’ de Doris Betts, se sitúa en el año 1964 en el sur de Estados Unidos. Explica la historia de Violet, una joven accidentalmente herida por su padre en la adolescencia, con una gran cicatriz en la cara que ansía eliminar. Por este motivo emprende un viaje hacia Oklahoma, donde se encuentra a un evangelista que vende milagros a través de la televisión, con la esperanza de que la sane y de volver a recuperar su precioso rostro. Pero en este viaje Violet conocerá a dos soldados, Monty y Flick, que le harán cambiar la manera de ver las cosas...

VIOLET se presentó la temporada pasada en el ciclo Encores! Off-Center del New York City Center, y su éxito provocó este salto a Broadway. El montaje mantiene la premisa de un espectáculo de pequeño formato, pero trasladado a un escenario mayor. Una escenografía fija sitúa la acción en los años 60, con los músicos en el centro del escenario, y la acción transcurriendo ante ellos.

El peso de la función cae sobre una brillante Sutton Foster, quien da vida a Violet. La actriz muestra con gran entereza toda la fragilidad y el carisma de una joven que lleva años escondida detrás de una cicatriz, no mostrandose al mundo como quien realmente es. Será el personaje de Flick, un soldado de color interpretado por Joshua Henry, el que será capaz de descubrirla más allá de su apariencia física, de la misma manera que ella hará con él, ignorando la diferencia de razas.

El musical presenta ,mediante continuos flashbacks, la relación de la adolescente Violet (personaje interpretado por Emerson Steele) con su padre (Alexander Gemignani), figura clave en la vida de la joven. Estos flashbacks, perfectamente integrados, ayudan a comprender el conflicto interno de Violet y su personalidad.

VIOLET habla sobre el poder del amor, sobre cómo el hecho de que alguien descubra en ti tu máximo potencial y sea capaz de verte más allá de las apariencias te convierte en esa persona que tanto ansiabas lograr a ser.

Desarrollada en un solo acto de 1 hora y 45 minutos de duración, VIOLET es un exquisito dulce entre las grandes y sofisticadas golosinas de Broadway. La partitura de bellas melodías con aromas de country, gospel y blues escrita por Jeanine Tesori; el libreto inteligente y mordaz de Brian Crawley; junto al sublime trabajo de Sutton Foster y el resto del elenco hacen de VIOLET un brillante musical que merece la pena ser descubierto antes de que finalice su breve temporada el próximo 10 de agosto de 2014.

Joshua Henry, Sutton Foster y Colin Donnell junto a Emerson Steele y Alexander Gemignani (al fondo)