Tras el éxito cosechado en la primera edición de ‘Por Un Micromusical’, Microteatro por Dinero junto a la productora Stage Entertainment España presentan por segundo año consecutivo este ciclo dedicado al teatro musical.

La comedia, la fantasía y hasta la improvisación tienen cabida en una programación que se podrá disfrutar hasta el 4 de enero de 2015 en Microteatro por Dinero, un multiespacio creado en el año 2009 en el que el público se reduce a un máximo de 15 espectadores por sesión en cinco habitaciones de unos siete metros cuadrados donde la experiencia escénica es radicalmente distinta a la que el espectador está habituado.

Además de la cercanía con los intérpretes, el precio es otra de las diferencias que el público aficionado a los musicales notará: la entrada de cada micromusical cuesta 4 euros (3 en el caso de los infantiles). Lo que no varía es la presencia de artistas habituales del género, como Mariola Peña (MARTA TIENE UN MARCAPASOS), Marc Parejo (EXCÍTAME) y Julián Salguero (FRANKENSTEIN), ni el cariño de todos los actores por unos títulos que defienden a capa y espada.

Junto a las cinco obras que constituyen la programación principal, el espacio acoge una sesión golfa con ocho producciones que rotan según el día de la semana y cuatro montajes infantiles para que los más pequeños disfruten durante las mañanas de los sábados y domingos, con una pieza de fantasía especialmente creada para bebés.

El responsable de prensa de la productora Stage Entertainment, Quique Comyn, y la gerente de Microteatro por Dinero, Verónica Larios, tienen mucho que ver en la selección final de piezas entre las más de 100 propuestas enviadas a concurso en esta nueva convocatoria.

En la presentación de esta segunda edición de ‘Por Un MicroMusical’, Comyn explica que “gracias al éxito del año anterior, el público viene sabiendo lo que va a ver, algo que hemos notado incluso en la elaboración de los proyectos que se han presentado en esta edición”. “Nos percatamos de que todo encaja mejor, somos conscientes de que contamos con una gran variedad y creemos que los proyectos seleccionados son de gran calidad”, añade.

Por su parte, la responsable del espacio madrileño apunta que “el año pasado fue una edición de prueba mientras que esta vez contamos con más experiencia a la hora de saber cómo funcionan las piezas con el público”. Y destaca, por otro lado, que “las escenografías están muy cuidadas, algo que nos encanta porque ayuda a que el público se sienta parte del espacio”.

Larios, que reconoce que el público que se acerca a disfrutar de los micromusicales es un espectador que habitualmente no acude a Microteatro por Dinero, cuenta que “supimos que habría una segunda edición desde que vimos que a la gente le fascinó la propuesta”; a lo que Comyn añade que “fue algo que se notó mucho en la afluencia de público”.

Convencidos de que el ciclo de micromusicales ha llegado para convertirse en una cita anual, subrayan que el formato aporta frescura y experiencia a ambas empresas. “A nosotros nos aporta el conocimiento de Stage. La selección la hacemos en conjunto, pero, evidentemente, su criterio cuenta con mucha más base que el nuestro”, confiesa Verónica.

Según Quique Comyn, “esta es una forma más light de que el público más reticente cate el género, además de una fuente de generación de nuevos espectadores”. Para el responsable de prensa de Stage, “hay temáticas menos comerciales que no se programan en la cartelera habitual y ésta es una ocasión perfecta para hacerlo”.

Además de llevar a cabo su trabajo en la productora, Quique se ha lanzado a la creación de un micromusical, escribiendo junto a Carlo D’Ursi una de las piezas que forman parte de esta edición, SÍ QUIERO, ¿PERO CONTIGO?, protagonizada por D’Ursi y Alejandro Albarracín. Una comedia desértica sobre la que explica que “a nivel personal ha sido una experiencia diferente y muy divertida; jamás me habría atrevido a escribir un proyecto de varias horas, pero esto es un caso distinto”.

Dos de los intérpretes que protagonizan uno de los micromusicales seleccionados en esta edición son Julián Salguero y Verónica Polo, quienes no son nuevos en este formato. Juntos protagonizaron el micromusical más visto de la primera edición, POR CULPA DEL AMOR, que tras su paso por Madrid ha viajado por distintas ciudades españolas y con el que todavía siguen trabajando. Esta vez dejan de lado el romanticismo de aquella historia para poner en pie una comedia terrorífica sobre la famosa chica de la curva.

“El año pasado fue nuestra primera vez y lo recordamos como una experiencia muy especial con la que aprendimos mucho al no haber trabajado hasta ese momento en microteatro”, cuenta la actriz. Mientras que su compañero explica que “en aquel momento tuvimos miedo a presentarlo a la prensa y nos lanzamos directos a la experiencia con el público, pero desde entonces me he centrado en trabajar en este formato”.

Salguero recuerda que “LA CHICA DE LA CURVA surgió al trabajar al lado de una obra de terror y plantearme que sería interesante hacer un micromusical de ese género. Más adelante, tras perderme con el coche en la carretera, me vi tarareando una canción que sirvió para comenzar a crear las canciones de la pieza.”

Ambos coinciden en que la forma de trabajo es distinta a la del teatro clásico. Verónica revela que “entramos una hora y media antes del primer pase para maquillarnos, montar la escenografía y calentar las voces; vivimos cada día con mucha intensidad, pero al ser tan breve la duración del montaje, el tiempo acaba pasando muy rápido”.

Iñigo Etayo (BLANCANIEVES BOULEVARD, LA LEYENDA DEL UNICORNIO) y Clara Alvarado protagonizan, junto al director Iker Azkoitia, POR ÚLTIMA VEZ, una obra en la que drama, comedia y música se fusionan en la historia de dos jóvenes con una amistad bastante consolidada que comparten planta en un hospital. “Tienen distintas formas de ver la vida, un contraste que deriva en una situación límite entre canciones”, resume la actriz, que tras quedarse a las puertas de entrar en musicales de renombre se estrena profesionalmente en Microteatro por Dinero. Ambos recibieron la propuesta de las manos de Iker Azkoitia: ella en su escuela de arte dramático y él a través de una convocatoria en la que buscaban al personaje masculino.

El actor define la experiencia del microteatro como “algo radicalmente distinto a lo que un actor está habituado a hacer, donde la cercanía con el público es un reto absoluto”. Alvarado confiesa que “da mucho vértigo, porque actúas y cantas teniendo al público a unos centímetros de ti; impacta y cuesta meterte en tu burbuja, aunque al final sirve para conseguir que los lazos entre espectador y actor sean más sólidos”.

Tanto uno como otro se muestran expectantes ante la reacción del público debido a lo delicado de una trama en la que sus personajes se enfrentan al abismo de sus existencias subiendo juntos a una azotea, quizá por última vez. “Presentar, retorcer y entregar un desenlace en sólo 15 minutos es un desafío”, concluye Clara.

Además de las 21 piezas seleccionadas, Stage Entertainment expone en las paredes de Microteatro por Dinero una serie de fotografías que repasa los espectáculos en los que la productora ha trabajado durante sus 15 años de trayectoria en nuestro país. Según Quique Comyn, “como estamos de aniversario hemos querido hacer memoria permitiendo al público que conozca la evolución de Stage a través de una selección de imágenes de los títulos que hemos traído a España durante todos estos años”.

Iñigo Etayo y Clara Alvarado, actores protagonistas de POR ÚLTIMA VEZ